Dirección: El Espejo Negro
Coma: Estado en el que uno se queda profundamente dormido y no tiene cosquillas, ni hambre ni frío, y ni ganas de rascarse el ombligo.
Esta es la historia de Óscar, un niño que sufrió un accidente y quedo sumergido en un largo y profundo sueño. Un dormir comatoso que lo llevó a estar ensoñando nueve meses, con todos sus días y noches, semanas y meses, minutos y horas sin poder moverse.
Un coma de buenas noches en los que sus padres dedicaron todo su tiempo a recordarle los cuentos que le habían leído a los pies de su cama desde muy pequeño, antes de apagar la luz y recibir el beso del sueño.
Su hermana menor no entendía si aquello del coma era como las siestas de verano después de comer sandía, o jugar a la gallinita ciega y por eso no se movía... Pero una voz al oído de Óscar le decía que tenía que despertar y volver a correr y a jugar con su hermana Lucía. Y dejarse de vaguear y de cuentos chinos, e ir al colegio con sus compañeros y amigos, y jugar al baloncesto como hacía de lunes a viernes todas las tardes incluso en invierno. Un día, a las doce en punto de la mañana, algo extraordinario sucedió… y Óscar primero abrió un ojo, y luego los dos, bostezó y despertó… Pero …
Producción: El espejo negro (Andalucía)
Una colaboración del Centro Dramático Nacional y el Centro Internacional del Títere de Tolosa (Topic)